El amor hace perder la cabeza

El amor hace perder la cabeza

Los que me hacen sonreír.

jueves, 31 de marzo de 2011

Capitulo 60: Amigos.

-Patri, cariño, despierta.

-Umm…Ya voy…No tengo ganas.

-Es que desde anoche queria decirte que mientras que estabas durmiendo te llamo Diego.

El nombre de Diego empieza a sonar de un lado para otro en la cabeza de Patri.

-Diego?..Y que quería?

-Nose, me dijo que lo llamaras.

-Vale, voy a llamarlo.

La madre de Patricia sale de la habitación dejando a su hija sola. Ella coge el telefono y busca en la agenda el número de Diego. Lo encuentra. Coge aire, mucho, y lo expulsa, seguidamente pulsa el botón de llamada.

-¿Si?-dice él.

-Diego, soy Patricia…¿Qué querias decirme?

-Patri..Necesitamos hablar. Sobre nosotros, sobre ti, sobre mi, sobre todo lo que nos rodea.

-Losé. ¿Puedes quedar hoy? A las 5 en el parque ese que hay por mi casa.

-Ok. Allí estaré. Adiós.

-Adiós.

La llamada finaliza. Dos corazones laten al ritmo de dos motores. Que decir, que saber, que coño pensar de todo esto. A la misma vez, los dos dejan el movil encima de la mesa, y a la misma vez también se tumban en la cama. Por sus cabezas pasan todo tipo de preguntas y de respuestas sin ningún sentido. Él coge otra vez el móvil y busca la foto de ellos dos besandose. Era bonito ver como todo parecía magico al lado de ella. Absolutamente todo. Estar junto a ella,sentir su piel, sus labios, los abrazos cálidos en el invierno, sentir que todo desaparecía a nuestro alrededor y que por alguna razón parecía un sueño de los más bonitos del mundo…Eso es. Ella, ella, ella…No era más que un estúpido sueño, un sueño del que hay que despertar, un sueño que esta misma tarde terminara.

17:00.

Patricia se sienta en un banco, esperando a que Diego llegue. Mira a su alrededor.Hace calor y aún así no hay nadie por aquí. Antes todo era distinto. Cuando Patri era pequeña este parque parecía otro. Algo distinto, con vida, con gritos de niños, con madres hablando por los codos, con rayos de sol cegando a los pájaros. Rebosaba vida hasta por las hojas de los arboles. Pero todo cambia. Hasta las mejores cosas. Cambian.

-Hola Patri. - dice Diego sancadola de sus pensamientos.

-Hola Diego.

Los dos se sientan en el banco.

-Bueno, ¿ De que querías hablar?

-De muchas cosas…Empezando por nosotros, claro si todavía sigue existiendo ese nosotros. –dice Diego.

-Diego, sabes que Oscar ha vuelto no?

-Si, lo supe hace unos días. Valeria me lo dijo.

-Pues bien, el mismo día que volvio me encontre con él. Estaba en el parque meditando sobre todo y aparecio él. Hablamos, de muchas cosas, de demasiados sentimiento olvidados y los que habiamos vuelto a encontrar, y los que simplemente no se fueron. Hablamos de ese “nosotros” y el corazón me dio un vuelvo. Pero yo no quiero hacerte daño Diego, tu te has portado muy bien conmigo, pero Oscar tiene una cosa que tu no le has podido arrebatar a él, mi corazón. Tu te ganastes mi cabeza, mi alma…Pero no fue suficiente para olvidarme de Oscar. Lo siento Diego, entiéndeme

-Patri…Te entiendo, pero comprende que duele. Yo te quiero muchísimo y por eso me gustaría que si de verdad quieres algo más con una amistad conmigo me lo digas, y si solo quieres una amistas fuerte, sólida y sin secretos, por favor dímelo también. Necesito apartar algunos sentimientos y encontrar otros.

-Te quiero, pero como amigo. Como alguien que me ha hecho pasar unos

de los mejores momentos de mi vida, en serio. Muchas gracias.

- No me las des, para eso están los amigos, no? –dice Diego sonriendo.

Diego se levanta del banco y mira a Patricia. Ella sonríe y se acerca a él para darle un beso en la mejilla. Un escalofrío recorre el cuerpo de Diego, como la primera vez que ella lo beso. Se va alejando de aquel parque, poco a poco, mirando hacia atrás a Patricia. Dejando atrás aquel sueño tan bonito que vivió con ella.

____________________________________________________

Holaa! Lo siento por publicar tan tarde, pero entre los exámenes, las 2 que he suspendido y entre que me han quitado el ordenador no he tenido tiempo para nada. Espero que os guste, un beso.

viernes, 18 de marzo de 2011

Capitulo 59: Tiovivo.

Hasta siempre, no. Hasta luego, tampoco. Gracias por hacerme feliz cariño, si, eso si.
Ella recapacita en su habitación, contando las estrellas del cielo, mirando por la ventana. Unas 1000 estrellas ha contado, mas o menos. Todas son iguales, pero algo las diferencia de las demas, cada una es especial a su manera.
Eso mismo pasa con Oscar y Diego. Cada uno a su manera. De uno, los besos, de otro las caricias, de los dos el alma, pero lo Oscar tiene algo que nunca Diego podrá tener, y como bien dijo Elena, es mi corazón.
Ese que como tantas veces he pensado, me vuelve loca. Bueno loca no
, loquisima.
Y lo peor de todo es que me ha costado admitirlo todo este tiempo, todo el tiempo que perdí. Pero ahora, lo tengo claro, lo quiero, mucho, demasiado.
Con ese pensamiento en la cabeza, cierra la ventana, mientras que las estrellas le reflejan en los ojos y chocan contra el cristal otra vez.
Acurrucándose contra la almohada, que tantas veces la ha visto llorar, se duerme, o al menos lo intenta. Se mueve para un lado y para otro, como incomoda
por la situación de no saber que va a pasar. Soñando con su sonrisa, esa que la vuelve loca, soñando con soñar en lo que puede, soñando con un salto en el vacío de quien no teme a la muerte...

A unas cuantas manzanas, él se pregunta lo mismo.
"¿Que pasara con nosotros?".
Oscar se come la cabeza, al borde de quedarse sin uñas de tanto mordérselas. Intenta distraerse mirando las estrellas, que un dia miro con ella a través de esa misma ventana. Recuerda ese día como si estuviera sucediendo ahora mismo...
Era verano. Oscar y Patricia se reían en la habitación de él, besán
dose delicadamente encima de la cama, mirándose uno al otro, sintiendo sus respiración contenida en el silencio.
Las estrellas brillaban mas que nunca esa noche, jamas las había visto brillar así.
-Oscar, mira las estrellas. Brillan como nunca.
-Es verdad...Es precioso.
-¿Sabes a que me recuerdan?-dice ella mirándolo.
-¿A que?
-A los tiovivos que había en la feria cuando eramos pequeños. De noche brillaban como nunca, con esas luces que nos dejaban a todos con la boca abierta.
Eran preciosos, parecía que no podía haber nada mas bonito en el mundo, y cada vez que los veías, te querías montar en ellos, aunque solo fuera por parecer que estabas allí en el cielo, junto a las estrellas.
El silencio se apodera de la habitación, y Oscar abraza mas fuerte aún a Patricia.
El recuerdo se desvanece en la mente de él y una sonrisa aparece en su cara, por breve que sea.
Aquel tiovivo que nombraba Patricia, le hace pensar...El tiovivo, las vueltas que da la vida.
Un día puedes ser la personas mas feliz del mundo entero, al día siguiente todo esta del revés. Ya no sabes ni quien eres, ni quien crees ser, ni como ni desde cuando te pasa esto.
Pasas 1 día bien y los 364 días que quedan mal. El tiovivo de la vida no para. No. Es un viaje sin billete de vuelta, donde tienes que aguantar todo,absolutamente todo.
Oscar cierra la ventana, al igual que lo hizo Patricia hace unos minutos. Piensa por ultima vez en aquella noche de verano que pasaron juntos, y se tumba en la cama.
Apaga la luz, y mira hacia la ventana. Sus manos se posan encima de su tripa, y cierra los ojos, poco a poco, dejando su mente en blanco, o al menos intentándolo.
Poco a poco, las estrellas dejan de estar ahí, y pasan a formar parte de sus sueños. Soñando como ella, con esa noche de verano. Soñando como ella, en sus sentimiento al borde del precipicio.
Soñando con un mañana mejor y con un pasado olvidado. Soñando con lo que queda por venir, o lo que ha venido ya y que cuesta olvidar.
Soñando con algo que siempre sueña, ella.

Una sonrisa, pequeña, aparece en la cara de Patricia.
Su madre la observa desde la puerta de la habitación, mirando a su niña, la que se ha hecho mayor.
Viendo como al igual que el cielo, su cara se ilumina en sueños.
Rompiendo el momento, el teléfono empieza a sonar. Corriendo, su madre cierra la puerta y coge el teléfono.
-¿Si? -contesta ella.
-Hola, ¿esta Patricia?- dice una voz de chico.
-Estar esta, pero esta durmiendo, estaba muy cansada.
-Oh...Vale esta bien, dígale que he llamado.
-Yo se lo digo mañana cuando se despierte. Por cierto, a quien tengo que decir que la ha llamado?
-Diego. Dígale que la ha llamado Diego... Adiós.
-Adiós.
La conversación se acaba. El teléfono deja de sonar, y se cuelga. La madre de Patricia, termina de cerrar completamente la puerta de la habitación a su hija, y recuerda decirle que la han llamado.
El chico que ha llamado, en este caso, cierra él mismo la puerta
de su habitación.
Una lagrimita, pequeña, se derrama por su cara. No quiere llorar. No. Es mas no debe, ni puede, los hombres nunca lloran.
Apreta los puños, y da un golpe en la mesa, haciendo que el bolígrafo que hay encima rebote. Quiere hablar con Patricia. Quiere decirle que tiene que hablar con ella. Quiere decirle que no puede seguir así. Quiere decirle, que por si no lo sabe, Oscar a vuelto. Quiere decirle que la quiere mucho. Quiere decirle, que quiere decirle muchas cosas, tantas, que pierde la cuenta.
Él tambien se tumba en la cama, pero directamente no duerme, no mira a las estrellas, tan solo piensa. Y piensa, y piensa y piensa mas...Tanto que ya no sabe que pensar.

____________________________________________________
Siento el retraso. Espero que os guste el capitulo, espero poder publicar otro la semana que viene.
Un beso.

domingo, 13 de marzo de 2011

Capitulo 58: Tu corazón.

Tic, tac, tic, tac...
Las agujas del reloj pasan sin tener la amabilidad de pararse para siempre. Los días pasan con la poca suerte de recordar todo lo que ha pasado. Un simple corazón a nose cuantos kilómetros de distancia, piensa lo mismo que el otro corazón. La vida pasa delante de sus narices sin darse cuenta, los minutos son horas, y las horas, décadas...
Las lagrimas ya son son gotitas, son medio mares, que llenan de sal los momentos mas amargos. Con ello los recuerdos se disuelven y se vuelven turbios, pero da igual que sean turbios, nítidos, claros, porque nadie puede parar lo que esta a punto de suceder, y no, no creo que esto sea bueno para un corazón que ya no puede mas.

~Cuatro meses después.

La chaqueta le resbala de las manos y cae al suelo. Sus manos se posan en su cara, tapando la boca y la nariz. Las lagrimas empiezan a salir de sus ojos, derramándose por la cara.
Frente a frente, su cara casi al lado de la suya, como rozándose.
A unos cuantos pasos de ella, después de cuatro meses, aparece él. Su pelo, su sonrisa, sus ojos...Su corazón.
Corre hacia él. Y lo abraza. Después de estos 4 putos meses. Y siento que empiezan a temblar, de la euforia, de las ganas de darse cuenta de que ahora si, que puede volver a respirar.
Patricia deja de abrazar a Oscar.
-Has vuelto...-dice ella con los ojos brillando.
-Te lo prometí... Volvería cuando mi corazón sanase.
-Y tu corazón, esta bien ahora mismo?
-Mi corazón ahora mismo, esta a mil por hora, pero aparte de eso se ha recuperado.-dice Oscar mirándola a los ojos.
-Me alegro de que hayas vuelto. - sonríe Patricia.
-Y yo me alegro de volver... Cuatro meses es mucho tiempo, demasiado.
-Lose.
-Y bueno, que tal?
-Que tal de que? -dice Patricia sentándose en una banco junto a Oscar.
-Tu vida, que que tal, que es de ella, de esa sonrisa que tienes ahora mismo...
-Pues yo estoy bien. Han sido cuatro meses un poco jodidos...Peleas con mis padres, con mis amigas por no querer salir de casa, hasta incluso con Diego.
-Amm...Con Diego.
-Si...Al pobre lo estoy dejando hecho polvo..Por mis ganas de morirme mas bien.
-Y porque querías morirte?
-Porque tu no estabas. Te habías ido y creía que nunca ibas a volver.
-Pero he vuelto...Y ahora que va a pasar?
-Que va a pasar con que?
-Con nosotros.
El silencio inunda el parque, ese "nosotros" resuena en la cabeza de Patri. Los pajaros medio cantan, medio parece que gritan. No sabe si salir corriendo o decirle algo. Su cabeza esta demasiado cargada de cosas como para decidir que decir.
-Oscar, en este momento no puedo decirte nada, dejame tiempo para asimilar que has vuelto.
-Vale, te entiendo...Bueno me tengo que ir, mis padres me estan esperando.
-Esta bien. Ten cuidado.
-Siempre lo tengo.
Cogiendo su maleta, sale por la puerta del parque y deja a Patricia con un corazon que ahora en vez de estar malherido, esta herido del todo. Ya no sabe ni como se llama de la confusión.
En estos cuatro meses le ha dado tiempo a pensar mucho, en sobre que hacer, o que decir o en como se confunden las palabras una vez que salen de la boca. Odiamos a quien mas queremos, y queremos a quien realmente no le importamos. Y que decir, de pensar...Pensamos demasiado y una acabo cansándose.
Patricia se levanta del banco, y se va hacia su casa, que apenas esta a unas manzanas. La brisa le acaricia la cara y escuchando una canción, la acompaña en los coros, hasta llegar a su casa.
-Hola mama.
-Hola hija. Por cierto ha llamado Elena. Me ha dicho que la llames.
-Voy a llamarla.
Cojo el fijo y marco el numero de su casa.
-¿Si? -dice una voz de chico.
-Hola, soy Patri, ¿esta Elena?
-Aaa, hola Patri, voy a llamar a mi hermana.
-Ok.
Pasados unos segundos, Elena coge el teléfono.
-Patri?
-Si, dime, que querías?
-Nada, solo quería saber que hacías.
-Amm, pues nada, he ido a dar una vuelta al parque.
-Y que tal?
-Jaja pues muy bien, demasiado diría yo.
-¿Porque?
Patricia cierra la puerta de su habitación.
-Elena, ha vuelto...Ha vuelto y lo he visto.
-Oscar?
-Si...
-Y que has sentido?
-Que podía volver a respirar.
-...Entonces?
-Entonces, nada. Estoy harta de pensar, y decidir. Una ultima vez, una ultima respuesta. No mas, por favor. Tengo que pensarlo por ultima vez en la vida, pero tengo que hacerlo rápido, se lo prometí...A los dos.
-A los dos?
-A Diego y a Oscar.
-Diego...Que ha pasado con él?
-Le dije que necesitaba tiempo, mi vida esta patas arriba y necesito aclarar las cosas.
-Habéis roto?
-De momento, es una separación temporal. Él es demasiado bueno para seguir sufriendo por mi...Y lo quiero, es mas lo adoro, pero hay algo que no tiene. Algo que tiene Oscar.
-Tu corazón.
-Que?-digo yo confundida.
-Que esa cosa que Diego no tiene es tu corazón. Tu corazón, siempre desde el primer dia que os conocisteis en el campamento lo ha tenido Oscar. Se lo guardo para el solito y nunca te lo devolvió. Con lo que has querido a Diego a sido con la cabeza.
Y entonces lo entiende todo, y dice un simple adiós a Elena y promete volverla a llamar. Se sienta en la alfombra de la habitación, y debajo de la cama, encuentra un pico de una foto, ya medio arrugada de pasar tanto tiempo. La coge y le quita el polvo soplandole.
Dos jóvenes enamorados se besan, y sonríen al mismo tiempo. Ella recuerda esas palabras que él mismo le dijo en ese instante:
"-¿Porque haces una foto?
-Para fotografiar nuestros mejores momentos juntos, para que siempre los recordemos.
-Te quiero.
-Y yo a ti."
Una lagrimita, pequeña, casi diminuta, cae encima de la foto y ella por fin, se da cuenta de que no había tanto que pensar, solo había que darse cuenta de que lo quería, y que el único problema era ella.

__________________________________________________________
HOLA! BUENO COMO VERÉIS, ESTA HISTORIA YA ESTA LLEGANDO A SU FIN, LE QUEDARAN UNOS 3, 4 O 5 CAPÍTULOS, O ALOMEJOR 7, QUIEN SABE.
QUERÍA DAR MILLONES DE GRACIAS A MIS 121 SEGUIDORES, QUE ME HAN DADO FUERZAS PARA SEGUIR ADELANTE. OS COMENTO QUE BUENO, EMPEZARE UN NUEVO BLOG, O UN NUEVO PERFIL FE BLOGGER, NOSE DEPENDE, PERO ME HA ENCANTADO COMPARTIR ESTA LOCA HISTORIA DE AMOR CON VOSOTROS/AS! :D
También aprovecho para agradecer este premio a Mary.
Os lo recomiendo. Escribe unos textos preciosos, y totalmente sacados de su prodigiosa cabezita.
Un beso.

Normas del premio:
-Exponer el blog.
-Compartir 8 cosas sobre ti
-Pasarlo a los blogs que mas te gusten.

~Las 8 cosas de mí:
-
No soporto que me toquen la nariz.
-Me gustan, bueno me encantan, las tardes de palomitas, películas y amigas.
-Se me da bien escuchar a los demás.
-Me suelen decir que pongo mil caras.
-Odio que él se vaya a ir.
-Tengo fobia a las arañas.
-No me gusta los espaguetis.
-Y por supuesto, quiero un Step en mi vida

~Este premio se lo doy a todos mis seguidores, por ser como son, gracias por estar ahi siempre.

viernes, 4 de marzo de 2011

Capitulo 57: Ya nada volverá a ser como antes.

El despertador, por 5º vez empieza a sonar. Mis ganas de ir al instituto, después de que ya nadie se vaya a sentar a mi lado, después de que mis padres (por suerte) no se entraran de mis pequeños desmayos, después que casi llamen a la ambulancia, después de que Oscar se haya ido, mis ganas son nulas. Están al minino, por no decir que no tengo ni un pelin.
Me toco el pelo, agitándolo un poco, para despertarme mejor. Mis pies tocan el suelo frío y un escalofrío pequeño recorre mi cuerpo.
Me pongo unos leggins marrones, con unas botas altas, también marrones y un jersey de un tono marrón pero mas claro. Me pongo el abrigo y cojo la mochila.
-Mama, me voy.
-¿Te vas andando?
-Si, hoy Elena viene a por mi. Es que ahora nos turnamos.
-A vale,adiós.
Cojo la llave por si acaso, y cierro la puerta. Abro la puerta del portal y veo a Elena de espaldas.
-Elena! -digo yo dándole un susto.
-Patri te mato! El susto que me has dado joder! Esto por la mañana no, eh...
Con una media sonrisa en la cara me pongo al lado de ella y andamos al instituto. Hoy no hace mucho frío, solo que viene un poco de aire. Empieza a verse un poco de sol por las mañanas, que termina por deslumbrarnos al mediodía.
Andamos por las calles que están llenas de recuerdos imborrables, tanto como de hoy, tanto como de ayer. Demasiadas risas, demasiadas lagrimas se derramaron. Y si, todavía sigo aqui, pensando donde estará él, su carita de niño bueno y con unas ganas enormes de gritarle te quiero.
-Patri?- Elena me da un pequeño empujón.
-Emm, si...Que decias?
-Que ya hemos llegado al instituto.
-Pues que rapido...
-Ya...Es que las cosas que no quieres que lleguen, llegan rapidísimo, casi sin poder ni parpadear, y las cosas que quieres que lleguen rápido, así sin darte cuenta, tardan una eternidad.
-Llevas toda la razon del mundo...
Entramos a clase, con la frase de Elena en mi mente, haciendo que solo pienso en ello. Dejamos las mochilas y nos salimos un poco al pasillo. De repente, Hector le da un susto a Elena.
-Aa! - grita Elena.
-Te asustas con nada ehh... -digo yo.
-Es que es así de mona ella.- dice Hector mordiéndole la oreja.
-Jaja, oye Hector, has visto a Diego?-pregunto.
-Si, si lo he visto, estaba arriba, en su clase.
-Vale, gracias. Ahora vengo.
Subo corriendo las escaleras hasta su clase. 4ºB.
En la puerta de la clase hay un cartel indicando la clase. Miro dentro de la clase. Algunos tios, con los pies encima de la mesa, ríen de a saber que. Otras cuantas chicas miran por la ventana y gritan a la misma vez que enseguida bajan. Un chico le deja a otro los deberes de Ingles y el otro dice a al vez:
-Están mal, pero copiate.
Típico. Están mal, pero siempre se los dejas al compañero.
-¿Estas buscando a alguien? -dice una voz de chica detrás de mi.
-Emm... Si a Diego.
-Aa tu debes ser Patricia, verdad?
-Si, encantada.
-Igualmente, yo soy Jimena. Soy compañera y medio prima de Diego jaja, casualidades de la vida.
-Jaja.
-Por cierto, Diego esta en esa clase- la señala con el dedo-, 4ºA.
-Ok, muchas gracias y encantada de conocerte.
-Lo mismo digo!
Corre hacia su clase y se une a las chicas de la ventana. Llego a la puerta de la otra clase. En esta hay menos gente todavía, solo unos 2 chicas apoyadas en la ventana.
De repente, alguien me tira un pellizco en la espalda.
-Seras...! - grito dándome la vuelta.
-¿El que soy? - dice Diego sonriéndome de oreja a oreja.
-Un tonto, es o es lo que eres. - le digo abrazándolo.
-¿Que tal estas hoy?
-Bueno, bien, con mucho sueño.
-Puff, como todo el mundo jaja por cierto, como me has encontrado? Digo, porque no sabes cual es mi clase.
-Le he preguntado a una chica, Jimena de 4ºB.
-Amm, A Jima.
-...Jima?
-Si, asi la llamamos jaja.
-Que cosas teneis los de 4º ... jaja.
-Ya ves.
El timbre hace que dejemos de hablar y que nos quedemos medio sordos.
-Bueno cariño, me voy que me toca Matemáticas con el maravilloso Roberto...-digo yo.
-Ooo si maravilloso... Te quiero.
-Y yo.
Me da un beso suave y me voy corriendo escaleras abajo. La puerta de mi clase se esta cerrando en ese momento.
-Espera! -digo medio gritando.
-Señorita Meco, la próxima vez, llegue antes y no me grite.
-Vale, vale.
Entro a clase y me siento en la silla. Apenas me acordaba de que voy a estar sola todo el curso...
-Bueno, quien falta hoy? -dice el profesor.
-Faltan Marina y Oscar. -dice Valeria.
-Bueno Marina siempre falta, pero Oscar?
-Se ha ido a nose donde...No creo que vuelva en todo el curso. -dice un chico.
-Que lastima...Bueno, voy a tacharlo de la lista.
El movimiento del bolígrafo sobre el papel. Su nombre desapareciendo de la vida, de mi vida. A mi lado no se sentara nadie, no volveré a llorar por haberle abrazado después de tanto tiempo, mi corazón no estallara de la presión, mis lagrimas no resbalaran por mis mejillas como barcos navegando en el mar. Se ha ido, Oscar se ha ido...Por mi culpa, por ser tan indecisa, por no saber que elegir o que engañarme con tal de olvidar este puto sentimiento que no se ya ni lo que es. Se ha ido y ya nada volverá a ser como antes, no volverá hasta que su corazón pueda volver a recapacitar.

___________________________________________________
SIENTO EL RETRASO! UN BESITO!